Estragos amargos de mi perra enfermedad, perversa del alma

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Alguien muy cercana a mí.

Por Ernesto Salayandía García.

Estragos amargos de mi perra enfermedad, perversa del alma

En mis peores crisis de depresión, en mis fondos de soledad, en mis amargas experiencias con mis delirios de persecución, en mis perdidas y en el trance de esta perra enfermedad, cruel, maldita enfermedad perversa del alma, ella, mi hermanita, siempre estuvo ahí, llorando, viendo y viviendo mi decadencia, veía sus ojos hundidos en tristeza, su mirada llena de esperanza, transmitiendo lo que ella tanto busco y no encontró, serenidad, platicábamos mucho, pero ella no podía no quería salir, sus atascamientos con pastillas eran muy frecuentes, era como yo, toda una experta para conseguir la sustancia, manipulando, mintiendo, chantajeado, pero siempre se salía con la suya, a pesar que desde jóvenes viví en sangre propia las consecuencias de su alcoholismo, los pleitos en casa, los panchos, la ingobernabilidad de sus actos, fui, infinidad de veces a sacarla de las delegaciones, por haber chocado en completo estado de embriaguez, a pesar de que el alcohol, la dejo sin su escuela propia, , un kínder que ella amaba con pasión, y más aún, de ver su hundimiento, su sufrimiento, yo no solo seguí sus mismos pasos, sino que la supere en todos los sentidos, cuando estuve en un proceso de tres meses en un centro de rehabilitación, ella fue a darme ánimos, luego, salí y comencé a escribir mi columna De adicto a Adicto, que ella leía y coleccionaba, paso el tiempo y tuve que internarla en un anexo para mujeres, ahí jugo la parte, se las ingenio, una tarde se atascó de pastillas, en secreto, manipulo a alguien para conseguirlas, me fui de inmediato a la clínica del IMSS, en urgencias, ahí estaba ella, inconsciente, el doctor me dijo, es el corazón, está muy delicada.- Doctor, le respondí,. Es una sobredosis, esta intoxicada, nadie me creyó, después de 5 horas, no nos atendía como se estila en el Seguro Social, ella dormía como reina, la tome en mis brazos, la regrese al centro de rehabilitación, al día siguiente, como si nada hubiera pasado, desayunaba un par de huevos rancheros con frijoles negros. Conoció la abstenía, pero no la sobriedad. Genio y figura, hasta la sepultura.-

No hay quien le gane

El enfermo emocional, no lo entiende, ni lo reconoce, a pesar de los fondos que toca con severas consecuencias, el sello de distinción, de mis colegas, es la negación, estamos cortados con las mismas tijeras, no basta con tapar la botella, cambiar de sustancias, lo grave, son los juicios y las actitudes, el enfermo emocional, hablando de mí, es un tipo egocéntrico, neurótico, desequilibrado de sus pensamientos y emociones, por supuesto, explosivo, aislado, distante, vive en borrachera seca, mi hermanita, como yo, como todos los enfermos emocionales, registramos severas perdidas que no nos damos cuenta, como al pasar los años, nos volvemos mitómanos, perdemos, es decir, la honestidad, nos llenamos de soberbia, metiéndonos en lo que no nos importa, viendo la espina en el ojo ajeno y no la viga en el propio, neuróticos, no buscamos al que me la hizo, sino a ver con quien me la desquito, el borracho seco o activo, es envidioso, hipócrita, criticón, embustero, es un ser despreciable que a la larga habrá de quedarse solo, su afán de fastidiar a las personas con las que vive, tarde que temprano, habrán de darle la espalda, yo les llamo Juan Charrasqueado, por aquello de que su madre los recuerda con cariño, esta enfermedad es de perdidas, pierdes tu integridad, en automático te faltas al respeto, tu autoestima no existe, brilla por su ausencia, el despotismo, la indiferencia, tus egos, son una forma de vida que te orilla a la soledad, entonces no es problema de alcoholismo o cristal, marihuana, heroína o cocaína, es una enfermedad emocional, que no te abandona, hasta la muerte, me doy cuenta, de que muchos, como yo, viven con la resistencia al cambio, dominados por el autoengaño, sintiéndose el centro de universo, que el único que tiene derecho a resentirse soy yo, me doy cuenta de que somos una sociedad enferma, muy enferma, por demás mediocre, la gente mal nacida, destila veneno de su lengua y clava la daga por la espalda, porque cobardemente, esa es su forma de vivir, con un enorme vacío espiritual

Somos muchos, los del problema, pero pocos los elegidos

Cuando militaba en el grupo de AA en San Agustín Polanco de la CDMX, en mi búsqueda interior y en mi afán por servir fui a dar un servicio a un domicilio particular, se trataba de un joven de 21 años, atrapado en una adicción muy peligrosa, no doy datos, por razones obvias, este toxico, le tenía destrozado todo el sistema respiratorio, generando fuertes dolores en pecho y garganta, hijo único de un capitán piloto aviador comercial, en un trámite violento de divorcio y este chavo, en depresión y prendido de esa poderosa y destructiva droga, la mayor parte del tiempo, sus ojos estaban teñidos de rojo, flaco, abandonado de sí mismo, logre que fuera a juntas de AA, con el poco tiempo, escuche su historia, palpe su dolor y no lo deje solo, por desgracia la droga ya había exterminado la fortaleza de sus pulmones, murió de un paro espiratorio, me pudo en el alma y de estas vivencias, tengo un mundo, he visto morir a infinidad de mediocres que no se rindieron ante la diabólica enfermedad, muchos, aparentaron sobriedad, recuperación, pero de noche se desatrampaban, no he visto a nadie que le gane y día con día, veo a Ernesto en un buen número de adictos, veo a mi madre llorando de impotencia a mi esposa, asustada, frustrada y desesperada, ahí , en estas personas con las qué trato, veo a Ernesto, ese Ernesto, muerto en vida, atrapado sin salida, algunas noches me arrepiento de como arruine mi vida por las sustancias y mis conductas toxicas

Los viejos moldes

Yo no quería entender la complejidad de mi enfermedad, no sabía lo que en verdad es una recuperación completa, viví la borrachera seca en vivo y a todo color, me pego el síndrome de supresión, no me fui a consumir, porque Dios es muy grande, pero reuní todas las características para romperme tuti la madona, sufrí e hice sufrir a mi mujer, iba a grupo de AA a calentar la banca, a jugar al bote pateado, pasaba las juntas, los días, las semanas, los meses y yo seguía igual de neurótico explosivo, inestable, bipolar, mecha corta,  insatisfecho con sentimientos encontrados, pero a pesar de mis crisis existenciales, yo seguía buscando, a pie de lucha, no deje de escribir mi columna semanal De adicto a ADICTO, tampoco abandone mi grupo, por el contrario, me hice adicto a doble A,  incursione a la corriente de 24 horas de Alcohólicos Anónimos, viví mi experiencia de Cuarto y Quinto paso, di servicio a Familias Anónimas, me la pasaba de grupo en grupo, regalando mi historial, comencé a escribir en Plenitud, órgano oficial de la fraternidad de Alcohólicos Anónimos de la República mexicana, me distinguieron publicándome en muchos número, como también, me publicaron en la revista Gratitud de Venezuela y otras más de Cuba y Nueva York, este mes de mayo del 2021, celebre  22 años de estar limpio, libre de drogas, llevo más de mil artículos publicados en diferentes medios del continente americano, cuento con 12 libros publicados y he terminado 8 manuscritos, próximos libros para la prevención.

¿Por qué recae, el recaído?

En estos años de mi recuperación, no he perdido contacto con mi enfermedad, veo adultos de 35 años, que los conocí internados en los centros de rehabilitación, anexos que me abren las puertas y coy a dará servicios, los conocí, a ellos y ellas, adictos desde temprana edad, doce, trece o quince años, los he visto entrar y salir de un proceso a otro, de tres meses, acumulando más de 20 encierros en los últimos años. No han podido o no han querido salir del pantano de las arenas movedizas, soy testigo del alto índice de recaídas de clínicas y centros de rehabilitación, de cada 10 internos, 9 recaen y se hunden cada vez más y más, aun, con las nuevas y peligrosas sustancias, en mis tiempos, la droga mortal, fue la heroína, ahora, la droga de moda, es el cristal.- Los adictos mueren antes de cumplir 25 años, mueren en su proyecto escolar, claudican a sus estudios, por supuesto, que mueren en otras áreas, como en lo laboral, lo social y familiar, hasta que finalmente se hacen inquilinos de los panteones municipales.

La dedicatoria de este esfuerzo

Al adicto, atrapado en las garras de La Saliva del Diablo, a ese ser humano maniacodepresivo, al ludópata, adicto al juego, a los farmacodependientes, drogadictos por prescripción médica, a las víctimas de bulimia, disorexia y obesidad, a los adictos a los gimnasios, activos de la disorexia, también, dedico mi trabajo a los adictos al adicto, a los de la pornografía, el sexo, las mentiras, corrupción, a los que han intentados quitarse la vida, adictos  sufrir y a la autodestrucción, a los matrimonios jóvenes con antecedentes genéticos de neurosis, alcoholismo y drogadicción, también a los mentores, padres de adictos y en sí, para toda aquella persona que se siente identificada con las enfermedades emocionales y mentales, manifestadas de muchas maneras- Hay un contenido para la reflexión para las personas enfermas de ego, por demás soberbias y por ende son tóxicos, que no aceptan, ni tienen la humidad de pedir ayuda para enfrentar su condición emocional, el vacío espiritual se encuentra a flor de piel- Los cambios existen, cuando hay convicción, honestidad, honradez, no estoy de acuerdo en el concepto equivocado de algunos alcohólicos recuperados que afirman que los defectos de carácter, los patrones de conducta y los 7 pecados capitales no se pueden erradicar, ni modificar, muchos menos controlar, al respecto, quiero recordar algunas características de un adicto.- Un adicto es mitómano, es irresponsable, irreverente, impuntual, deshonesto, no cierra círculos, es neurótico, impulsivo, violento, conformista, narcisista,  mediocre, es manipulador, extorsionador emocional chantajista y tiene un cúmulo de defectos de carácter, quiere decir que solo debe de tapar la botella, confirmando el legado de los Alcohólicos Anónimos, que el único requisito para pertenecer, es dejar de beber y lo demás qué?.

Hijos de la mediocridad

Un estudiante que frecuentemente es reprobado, llega tarde a clases, no hace la tarea, debe hacer un gran cambio en su vida, sanar sus heridas profundas del alma, erradicar sus cadenas destructivas, levantar la autoestima y no decir.- Así nací y ni modo.- Dejé de ser mediocre cuando me enfrenté a mí mismo, pude erradicar mi celotipia infernal, mis pensamientos sicóticos, patológicos, logré vencer mis miedos al hablar en público, yo fui víctima del pánico escénico, tenía serias dificultades para socializar, soy maniaco depresivo, duraba en crisis hasta cinco días seguidos, he luchado contra mi pereza física, mental y espiritual, abandoné también mis mentiras, yo soy mitómano, he estado perdiendo mis malos hábitos y costumbres como el llegar tarde a todos lados, cambié en gran medida al sapo, al macho típico mexicano, al controlador, egocéntrico, soberbio, dejé de aparentar ser lo que no soy, yo era farol de la calle y oscuridad de mi casa, por supuesto que cuando alguien me dice que los defectos de carácter no se pueden cambiar, comprendo la magnitud de su enfermedad y confirmo, que las promesas de los Alcohólicos Anónimos se cumplen cuando se dice.- Una vida útil y feliz.- Yo disfruto de las mieles del programa de los 12 Pasos, pero tengo que luchar contra el cavernícola emocional que llevo dentro de mí y no ser mediocre al conformarme con el cumulo de defectos y patrones de conducta equivocados que me han dañado y han hecho que dañe a mis seres cercanos. La enfermedad emocional está en todas las personas.- Quien esté libre de culpa, que arroje la primera piedra. En AA, un virus de la actitud, común y generalizados, es la envidia que se destila por todos lados.-

Codependencia, la otra cara de la moneda

Hace rato, vino una mujer mayor de 80 años, con un hijo de 48, adicto, ingobernable, neurótico, mediocre, ella comenzó a platicar la triste historia de tener un drogadicto en casa, platicándome todo lo que hace por él, como el darle dinero, hacerle de comer, lavarle su ropa, prestarle un departamento donde vive y no solo eso, hacerle el aseo, porque el tipo no es ni para recoger una servilleta sucia del suelo, si él se enferma, ella lo cuida, le da sus medicinas, le hace su caldito de pollo y gelatinas, si se le descompone el auto, ella le hace a la mecánica y si no puede, paga las refacciones y la reparación, si llega a chocar por alcohólico y lo meten a la cárcel, ella, la mamá, paga la multa y la fianza para que salga libre, si debe dinero, esta mujer se convierte en financiera y le cubre sus deudas de inmediato, vaya, el drogadicto no batalla, su mamá le da dinero para las sustancias tóxicas, las crudas y todo tipo de problemas en que se pudiera meter o se mete.

No hay peor ciego, que él no quiere ver

La escuché con mirándola a los ojos, y cuando tuve oportunidad, le dije la verdad de la enfermedad.- Tú estás enferma, tu enfermedad se llama codependencia, no has dejado que tu hijo toque fondos y entra en crisis porque todo le resuelves, él ha llegado hasta donde tu haz permitido y el abusa de ti, porque tu así lo has querido, tienes, le dije, miedo y temor, tienes culpa y actúas así porque piensas que tú causas su adicción y su perdición, la verdad de las cosas, es que tienes ganancias secundarias cuando le das doscientos pesos, cuando le haces de comer o le lavas la ropa, como que todo esto, es arrullo al alma para ti. Gracias por leerme y más por escribirme.- ernestosalayandia@gmail.com 614 256 85 20  https://www.youtube.com/watch?v=AUQGZJVRczs

Staff de Notiissa.mx

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