Aprenden alfarería de Mata Ortiz con programa Jóvenes Construyendo el Futuro

• Entrega delegado Juan Carlos Loera 72 tarjetas de pago a beneficiarias y beneficiarios de Casas Grandes, Nuevo Casas Grandes, Ascensión e Ignacio Zaragoza.
• Por primera vez tenemos un presidente del pueblo que vela por los jóvenes mientras se capacitan en diversas actividades laborales, señala el representante del presidente en Chihuahua.

A través del programa Federal Jóvenes Construyendo el Futuro, Valeria Gisel Delgado Rosas eligió capacitarse en el oficio de la alfarería junto a grandes artesanos de la comunidad de Juan Mata Ortiz, una población famosa a nivel mundial por la exquisita elaboración de ollas de barro bellamente pintadas y consideradas verdaderas piezas de arte.

La joven de 22 años fue una de las beneficiarias en recibir la tarjeta del Banco de Bienestar al igual que 71 jóvenes más que tienen acceso a una beca económica mientras se capacitan en algún oficio o actividad de comercio y/o servicios en el municipio de Nuevo Casas Grandes.

El delegado estatal de los Programas de Desarrollo para el Bienestar, Juan Carlos Loera de la Rosa, encabezó el operativo de entrega de plásticos en el municipio de Nuevo Casas Grandes donde sostuvo una charla con la joven recién egresada de la carrera de Derecho.

Valeria sostuvo que tiene grandes expectativas respecto a la elaboración ollas y todo referente a lo que se realiza en Juan Mata Ortiz. Dijo que con el apoyo que recibe del Gobierno Federal podrá cubrir necesidades más apremiantes como el traslado al taller donde aprenderá la técnica ancestral de los antiguos pobladores de Paquimé.

“En este gobierno la prioridad es atender a los que nunca antes habían sido atendidos, y de manera muy especial a los jóvenes”, señaló Loera de la Rosa al referirse a uno de los programas más importantes de Gobierno Federal, ya que está orientado a jóvenes de 18 a 29 años que en este momento no están trabajando o no cuentan con un empleo formal o no se encuentran estudiando.

Este programa, añadió, además de ayudar a los jóvenes en adquirir experiencia y habilidades en el ámbito laboral ayuda también a los capacitadores, llamados “tutores”; es decir, patrones que reciben un beneficio al contratar a personal con conocimientos frescos y que a la vez le están enseñando.

Es como el dilema de qué fue primero, “si el huevo o la gallina”, ya que de manera especial a los jóvenes se les pide experiencia para ingresar a un trabajo, pero “cómo la van a adquirir si no les dan trabajo”.

Por ello esto es un reto, un reto para que los jóvenes puedan trabajar mientras están aprendiendo, pues sobre la marcha van aprendiendo, sobre la marcha van construyendo el futuro, integrándose e incorporándose al mercado laboral, “eso es lo que a mí de lo que más me gusta, porque sé lo que se siente, cuando terminas una carrera y no te puedes incorporar”, expresó el también representante del presidente en el estado.

Añadió que también está dedicado a hombres y mujeres que en algunos lugares donde no hay posibilidad de conseguir un empleo, ya sea porque no hay trabajo o ya sea por la edad, o porque ya salieron de la preparatoria o de la secundaria o por las condiciones económicas no pudieron seguir estudiando, pero que de igual manera se enfrenta a la misma realidad de los que sí estudiaron: no pueden conseguir un empleo.

Agregó que en algunos lugares como en la Sierra y en el propio Casas Grandes esta situación coincide en que por la misma falta de atención a los jóvenes muchos han tomado un camino equivocado, un camino que invariablemente los lleva a la cárcel o a la tumba, pero como no había de otra en muchos lugares, aún estamos padeciendo las consecuencias de un sistema económico de gobiernos que para lo único que servían era para enriquecer muy pocos y empobrecer a la mayoría.

Recordó a quienes critican el programa porque aseguran que se está dando dinero a los “ninis” y “lo dicen de manera despectiva y como un insulto hacia ustedes”. “Ustedes son muy jóvenes y no lo recuerdan, pero es la primera vez que un gobierno le da a la gente en lugar de quitarles. Es el primer gobierno que ve por los adultos mayores, por las personas con discapacidad, los estudiantes de preparatoria, los indígenas, las niñas y los niños hijos de madres trabajadoras, que si los jóvenes no tienen trabajo”.

Aclaró que aquí viene un programa para que aprendan a hacer algo o para que pongan en práctica sus conocimientos recién adquiridos “y eso nunca se había vivido”, sobre todo porque es la primera vez que tenemos un presidente del pueblo, un presidente sincero que habla con la verdad, finalizó Juan Carlos Loera.