Busca EE.UU y México estrategias contra el tráfico de armas y el fentanilo

La idea de enviar las Fuerzas Armadas de Washington a México para combatir el comercio ilegal de esta droga sintética está ganando cada vez más partidarios entre los republicanos de EE.UU.

Una delegación mexicana se encuentra en EE.UU. para acordar una estrategia conjunta contra el tráfico de armas y el fentanilo, una droga sintética que ha provocado fricciones entre ambos países, que se acusan mutuamente de no tomar suficientes medidas para terminar con el comercio ilegal de la sustancia.

«Hoy salen miembros del gabinete de seguridad de México a una reunión con funcionarios del Gobierno de EE.UU.», detalló el miércoles el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.

La comitiva está integrada por el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard; la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez; el titular de Salud, Jorge Alcocer; de la Secretaría de Marina, José Rafael Ojeda; el secretario de Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval González; y el fiscal general, Alejandro Gertz Manero.

«Tienen reuniones con funcionarios del Gobierno de EE.UU. y el Gobierno de Canadá [país afectado también por esta droga] en Washington. [Hablarán de] fentanilo, armas, migración y otros temas», añadió el mandatario.

«Una de las drogas más peligrosas»

El subsecretario mexicano de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, alertó esta semana que el fentanilo «es una de las drogas más peligrosas, inmediatamente adictiva, con una gran capacidad de causar sobredosis y derivar en la muerte de quien la consume». 

Asimismo, advirtió que se ha estimado que el fentanilo, originalmente diseñado para el manejo del dolor intenso que puede ocurrir, por ejemplo, durante una cirugía, es 100 veces más efectivo que la morfina y 50 veces más que la heroína.

No obstante, López-Gatell destacó que la droga no se produce en México. «Se fabrican en otros lugares, incluído en EE.UU. y hay rutas de fentanilo de EE.UU. a México. Entonces, es un problema importado», afirmó. 

«No queremos que nos pase. Por eso estamos haciendo prevención, aun cuando hoy por hoy no es un problema grande de salud pública. Queremos cooperar con EE.UU., que tiene un enorme problema de adicción, producción y de importación de fentanilo», aseveró.

Los datos del Gobierno de López Obrador indican que en 2021 hubo en México 19 fallecimientos por opioides, frente a 80.411 en EE.UU.  

Guerra a los cárteles

Por su parte, el presidente mexicano sostiene que una parte del fentanilo proviene de China, por lo que mandó una carta a su homólogo chino Xi Jinping para pedirle ayuda en el control de envíos que supuestamente salen del país asiático con destino a los puertos mexicanos.

Las autoridades chinas, por su parte, afirmaron que no existe un problema de tráfico ilegal de esa sustancia hacia el país latinoamericano, y apuntó a que el origen de las sobredosis en EE.UU. se encuentra en el propio territorio estadounidense.

Mientras, republicanos estadounidenses insisten en declarar la guerra a los cárteles mexicanos. Piden que el Gobierno de Joe Biden los declare como grupos terroristas, y así poder enviar a las Fuerzas Armadas de EE.UU. a México. 

La tensión contra los cárteles aumentó después del secuestro a finales de marzo de cuatro estadounidenses y la muerte de dos de ellos, en la ciudad fronteriza mexicana de Matamoros.

El senador republicano por Carolina del Sur, Lindsey Graham, que mantiene activo un discurso bélico y en contra de la soberanía de México, habló de «desatar la furia y el poderío de EE.UU.» contra los cárteles.

Propaganda electoral

López Obrador considera que están utilizando la droga con propósito propagandístico y electoral, de cara a los comicios de 2024.

El mandatario ha cuestionado también en varias ocasiones la flexible política de armas de EE.UU., ya que está íntimamente vinculada a la violencia perpetrada por organizaciones criminales en México. 

«Amenazan con invadir, venden armas de alto poder en sus tianguis [mercados], no hacen nada por sus jóvenes, padecen -lamentablemente- de la terrible y mortal pandemia del fentanilo, pero no atienden las causas», escribió recientemente en Twitter.

Por su parte, el presidente Joe Biden se opone a la intervención militar en el país vecino y rechaza la designación de los cárteles como terroristas, alegando que tal acción no le otorgaría a su gobierno «ninguna autoridad adicional».

Dos días antes de la llegada de la delegación mexicana, EE.UU. anunció que reforzará su estrategia contra el consumo y tráfico de fentanilo.

«En un momento en que la cadena mundial de suministro ilícito de fentanilo ha cambiado la forma en que se producen y trafican las sustancias ilícitas, la Administración anuncia una estrategia fortalecida de todo el gobierno para salvar vidas al interrumpir el tráfico de fentanilo ilícito y sus precursores a EE.UU.», comunicó.

Por su parte, el analista político Víctor Manuel Quintana asevera que EE.UU. es el único responsable de que en el país norteamericano exista el problema de la adicción al fentanilo. Además, sostiene que el tema debe tratarse a nivel global y no en un escenario donde Washington establece las reglas y los demás se someten a ellas.

RT